La lectura
atenta del Evangelio que cada día se nos propone para la celebración de la
Eucaristía, es un ejercicio recomendable para todo cristiano y por ende para
cualquier cofrade. Debemos de valorar el estimable valor que tiene la Palabra.
En Ella podemos encontrar sustento para nuestra vida diaria, para promover,
incentivar o enriquecer nuestra fe. Es un ejercicio sencillo, que podemos
incluso hacer en la intimidad. Meditar esa Palabra y guardarla en nuestro corazón,
nos puede dar ese aliento que tanto necesitamos. En la jornada de hoy es el
Evangelio de Mateo el protagonista. Concluye esta lectura así: "En
resumen: Tratad a los demás como queréis que ellos os traten". Estas son
las palabras que pronuncia Jesús. Entiendo que es una enseñanza utilísima.