lunes, 20 de mayo de 2013

EL MAGNO VÍA CRUCIS DEL 2017


 
Si la Peregrnación María, Reina de Granada comenzó a fraguarse cuando al término de la Passio Granatensis, en el transcurso de un programa de radio se formuló la pregunta de y ahora qué, la misma interpelación puede formulase tras la celebración del pasado sábado. Existen múltiples respuestas, pero una de ellas especialmente interesante: la celebración de un Magno Vía Crucis con motivo del Centenario de la fundación de la Cofradía del Vía Crucis que será en 2017. Si cuatro años han transcurrido desde la Passio hasta la conocida popularmente como Magna Mariana, el mismo tiempo nos separa ahora de tan señalada fecha.
La Cofradía del Vía Crucis, fundada en 1917, tiene el honor de figurar como decana en el orden federativo. En verdad, esta circunstancia no obedece estrictamente a un literal histórico, puesto que con anterioridad se fundaron otras corporaciones que figuran actualmente en la nómina federativa: Rosario (1492), aunque como rama penitencial no se creó hasta 1927 y fue en 1985 cuando se segregó de la Archicofradía matriz; Soledad de San Jerónimo, 1561. pero de un año para otro no tuvo en cuenta su antigüedad al crearse nuevos estatutos en 1925, Santo Sepulcro, 1615, a quien le ocurrió algo similar en 1924, o la del Cristo de San Agustín, que data de 1769, aunque no fue hasta 1992 cuando adquirió el carácter penitencial. Pero a efectos federativos el Vía Crucis es la decana y su centenario no debe pasar desapercibido.
No sería tarea sencilla porque existirían dificultades para localizar en la capital pasos que representaran alguna de las catorce estaciones, pero es probable que acudiendo a otras hermandades de la diócesis se pudiera completar el ciclo. Cabría además preguntarse si su organización, a diferencia de la Passio y la Magna, debería depositarse en una cofradía, en este caso la celebrante, o si debería de hacerse cargo de ella la Federación. Pero al margen de todo, la iniciativa ya ha comenzado a ser valorada en distintos ámbitos cofrades.