La Virgen de las Angustias está estos días más cerca de sus devotos, puesto que la podemos contemplar en el crucero del altar mayor de su Basílica. Allí se instalaba el día de su Ofrenda Floral, para presidir el altar de cultos que se traslado hasta la puerta cuando se inició el acto público y a este mismo lugar fue devuelta después. En este sitio permanecerá hasta que el templo cierre sus puertas este miércoles día 17. Entonces será devuelta a su Camarín, donde ya aguardará el día anterior a la procesión del último domingo de septiembre, en que de nuevo abandonará su habitual morada para ser llevada a sus andas de salida. Llama la atención, como se aprecia en las fotografías que acompañan esta información, que la Virgen luce el conocido como Manto de los Alféreces, que es el que luce durante los cultos de septiembre.