domingo, 27 de marzo de 2016

CATEDRAL-ESPACIOS URBANOS DE LA SEMANA SANTA DE GRANADA-8ª ENTREGA-BLANCA ESPIGARES

La Catedral de Granada es un proyecto que arranca algo más tarde que muchas de las parroquias y templos que comenzaron a erigirse tras la conquista. En un principio la sede de la Iglesia Catedral de Granada se emplazó en la Mezquita Real de la Alhambra. Esta fue construida por Muhammad III y en los textos de Ibn al Jatib es elogiada por sus mosaicos y lámparas de plata. Fue la primera iglesia bendecida para poder celebrar misa en ella, mientras se construía otra abajo en Granada, que después será la de la Casa Grande de San Francisco. Esta es la iglesia, ya demolida, que ocupaba la plaza Padre Suárez actual, frente a la Casa de los Tiros, a espaldas de la puerta principal de Capitanía. La Catedral de Granada poco después de la conquista, fue esa iglesia hasta 1507 que se trasladó a la de María de la O, como se llamaba a la mezquita mayor bendecida como iglesia. (actual Sagrario). El primer proyecto fue encomendado en 1506 a Enrique Egas que concibió un templo de estilo gótico, tomando como modelo la Catedral de Tolero. Las obras comenzaron, bajo la dirección del propio Egas, con la colocación solemne de la primera piedra el 25 de marzo de 1523 el día de la Encarnación, ya que la Catedral está encomendada a ella. Sin embargo, fue Diego de Siloé quien, en 1529, se encargó de las obras, que se concluirán en 1563. El arquitecto fue mucho más ambicioso y trazó las líneas renacentistas de todo el edificio sobre los cimientos gótico, con girola y cinco naves en lugar de las tres habituales, combinando en su estructura elementos de otros órdenes arquitectónicos.
Diego de Siloé fue un arquitecto y escultor nacido en 1495 en Burgos. Es el autor de la Escalera Dorada de la Catedral de Burgos. En 1528 se asienta en Granada y aquí se quedará hasta el final de sus días. De estilo clasicista construirá la iglesia del Monasterio de San Jerónimo. También hace esa esplendida iglesia de Íllora, la de la Encarnación, la de San Gabriel de Loja y la del Salvador de Úbeda. Las catedrales de Guadix y Málaga le deben a él sus principales trazos, y las de Guadalajara en Jalisco, y Lima y Cuzco en Perú. Y hace además un conjunto funerario impresionante para el Obispo Rodrigo Mercado de Zuazola que está en la Capilla de la Piedad de la Iglesia de San Miguel Arcángel en Oñate.
La región a finales del siglo XVI comenzó a perder fuerza económica, debido en parte a la política centralista de Felipe II y a la expulsión de los moriscos que sucede entre 1609 y 1613. Aún así, se realiza una reforma de la fachada principal que corre a cargo de Alonso Cano en 1664,
Alonso Cano nace en Granada en 1601 y fue pintor, escultor y arquitecto de renombre, tanto que se le considera uno de los más importantes artistas barrocos de España. De su escuela surgieron muchos buenos pintores y escultores. Se bautizó en la Iglesia de San Ildefonso y con 13 años le es detectado dotes importantes en el dibujo y lo llevan a Sevilla y entra en la escuela de Francisco Pacheco con el que también estudió Velazquez. De hecho fueron compañeros y mantuvieron una gran amistad toda la vida. Un anécdota es que en 1644 su mujer murió asesinada y se le acusó de la muerte. Fue torturado pero no se le pudo condenar al no demostrarse culpabilidad. Se refugió en Valencia en el convento de San Frnacisco y en 1647 se va a vivir a Madrid.
En la reforma de la fachada de la catedral de 1664 introduce algunos elementos barrocos. Se tenía pensado levantar dos torres de 81metros pero fue imposible por problemas de cimentación, económicos y por la muerte del propio Alonso Cano. Al final se quedó una torre de tres cuerpos como hoy vemos, frente a los seis que iba a tener, y con 57 metros de altura. Pese a los inconvenientes, la Catedral granadina posee un porte y una elegancia en las mezclas de estilos que la hace de una belleza exquisita y extraña.
En la fotografía una imagen del Vía Crucis de la Federación el año 2015