Nota recibida por parte de la comision reunida:
En las sesiones de trabajo realizadas los días 8 y
9 de abril, tras las aportaciones realizadas por los Srs. Presidentes, y tras
debatir sobre el hecho de la repercusión económica y social de las Hermandades,
se pueden extraer las siguientes conclusiones.
La principal repercusión de las Hermandades, es la
relativa a la acción social, cuestión ya analizada y debatida en los anteriores
encuentros.
El segundo elemento, es la importante aportación
económica, social y patrimonial que desarrollan.
El elemento patrimonial y cultural, se fundamenta en la
labor de conservación y ampliación del rico y amplio patrimonio que poseen las
Hermandades, desde hace siglos.
Es destacable el número de Hermandades y Cofradías que
sostienen, conservan y mantienen templos, iglesias, capillas, casas de
Hermandades, haciéndose cargo no sólo de su costoso mantenimiento, sino
incluso de su restauración y apertura no sólo a los fieles, si no al público
general, que pueden disfrutar de siglos de historia y de un patrimonio cultural
que enriquece la ciudad.
Otra cuestión debatida y analizada es la repercusión
socio laboral, relativa al mantenimiento de los oficios, oficios artesanales
que viven y trabajan en su mayoría por y para las Hermandades.
Según la asociación de Artesanos de Andalucía existen más
de 1.000 talleres profesionales, que generan trabajo y del que viven más de
10.000 familias.
Un dato, a modo de ejemplo, es el planteado desde
la ciudad de Málaga, en el que para la restauración del trono del
Cristo Resucitado se van a crear unos 31 puestos de trabajo.
Existe una relación de oficios artesanales
relacionadas con las Cofradías, Tallistas, restauradores, bordadores, orfebres,
plateros, cereros, costureros, floristas, creando puestos de trabajo de forma
directa e indirecta.
No sólo generando una actividad, si no desde el
punto de vista cultural, conservando oficios tradicionales, que estaría
abocados a perderse.
Incluso desde el seno de las propias Hermandades se
potencia este tipo de actividad, desarrollándose por ejemplo, talleres de
bordados, que enriquecen y mantienen estos oficios.
Otro elemento tratado es el relativo al hecho de la
globalidad de la Semana Santa, desde el punto de vista Turístico.
Sobre lo que supone la aportación en el hecho de que la
Semana Santa se exponga en la calle, que es ese patrimonio
inmaterial que anualmente al público general se ofrece, y la repercusión
que tienen para las ciudades, la ocupación hotelera, el sector servicios.
Junto a ello la estacionalidad de los puestos de trabajo
creados, no sólo en la propia Semana Santa, si no en la cuaresma, al
margen de lo dicho anteriormente de los oficios.
Y todo ello con las puntuales ayudas de la
Administración, que si bien colaboran, a veces se hacen escasas.
Esta reflexión pasada la Semana Santa, quiere
mostrar, la importante aportación que realizan las Hermandades y Cofradías a
las ciudades.