miércoles, 19 de octubre de 2016

ÓSCAR JIMÉNEZ #DeCerca


Ya inaugurado el curso cofrade, las hermandades comienzan a tener activos sus programas de actos y cultos, aunque no de forma frenética como suele ser habitual en la Cuaresma. Ahora es tiempo de retomar las charlas de formación, reuniones iniciales de costaleros, cultos mensuales, y sobretodo poner sobre el papel todos los trabajos a realizar en este año.
Desde hace ya tres años, el primer trimestre nos trae un evento cofrade diferente y llamativo para los amantes de la Semana Santa: la Feria ‘Capricho Cofrade’. Por ello queríamos contar hoy con la cabeza pensante de este especial encuentro de corporaciones con cofrades venidos desde muchos puntos de la provincia. Hoy conocemos #DeCerca a Óscar Jiménez.

-Hermano cofrade del Cristo de la Buena Muerte y Nuestra Señora del Amor y el Trabajo. ¿Cómo y cuándo llegas a tu cofradía?
Soy antiguo alumno salesiano del barrio del Zaidín y con solo 12 años portaba a María Auxiliadora, fue entonces cuando me dijeron que si quería entrar a formar parte de una de las primeras cuadrillas de costaleros, la cuadrilla de María Auxiliadora que portaba a la Virgen del Amor y del Trabajo, entre otras, y asi fue mi comienzo en mi Hermandad Ferroviaria.
-¿Las hermandades fueron una pasión para ti desde la niñez?
Mi infancia se forjó entre el Paseo de los Tristes, de donde es mi familia materna, y el barrio del Zaidín, de donde es mi familia paterna y donde he vivido toda la vida. Desde muy niño jugaba en el patio de mi abuela a los pies de la Alhambra a costaleros y capataz, con mi primo Raúl (Fofi) del Realejo, con muñecas de mi hermana y una silla. Vivíamos desde muy pequeños la Pasión.
Nuestra primera hermandad fue la Concha en la que salimos de acólitos y recuerdo que no pudimos terminar la Estación de Penitencia porque nos cayó una tromba de agua llegando a Catedral. Posteriormente salimos de nazarenos dos años en el Huerto de los Olivos y mi primo se apuntó a la Banda de Ripot, y yo por cercanía a la Banda de Lanzada, tras una corta etapa musical lo que nos llamaba de verdad eran las trabajaderas y a mí me ficharon para la cuadrilla anteriormente mencionada, y él se fue a Favores.
En nuestra casa siempre se ha vivido la Semana Santa de un modo muy especial y desde que tengo uso de razón me ha encantado.
-Además de la corporación ferroviaria, ¿alguna cofradía más te tiene en su nómina de hermanos?
Si, tengo la suerte de ser costalero del Señor de la Misericordia (Silencio), cada Jueves Santo vivo una Estación de Penitencia muy personal.
-¿Cómo es tu vida de hermandad durante todo el año?
La verdad es que es un no parar, soy una persona muy activa y me apunto a todo lo que necesite mi hermandad, aunque siempre es poco porque en una cofradía siempre hay muchas cosas que hacer y a veces no se puede compatibilizar la vida laboral y familiar con la cofrade, aunque intento fallar lo menos posible y tener iniciativas para que mi hermandad crezca día a día.
-En estos últimos años te hemos podido ver como costalero o incluso con el traje siendo parte del equipo de capataces de la hermandad del Cristo de la Buena Muerte. ¿Has ocupado algún lugar más en tu hermandad?
Actualmente soy vicehermano mayor de la Hermandad de los Ferroviarios y Capataz de la cuadrilla masculina y femenina del palio de la Virgen del Amor y del Trabajo.
-Sin duda alguna, la creación de la Feria ‘Capricho Cofrade’ ha sido toda una revolución en lo que a la actividad de hermandades se refiere en nuestra ciudad. ¿Cómo te planteaste llevar a cabo esta iniciativa?
Tras visitar muestras que se hacían en otras localidades, no entendía cómo Granada no era capaz de realizar este tipo de evento. Tras una conversación con un grupo de Hermanos Mayores de nuestra ciudad me di cuenta de que muchas de las Hermandades trabajaban con un solo proveedor porque no conocían otro y no se atrevían a cambiar. Entonces entendí que sería interesante traer a Granada un abanico de artesanos y empresas para que pudieran comparar y valorar el buen trabajo de algunos talleres artesanos.
Siempre he soñado con que todas las hermandades pudieran convivir juntas y que el joven cofrade que empieza en esto, pudiera acercarse a la hermandad que de verdad le gusta y hacerse hermano sin necesidad de que nadie lo apadrinara.
Tambien pienso que las Hermandades tienen un gran patrimonio que normalmente no pueden exponer en una estación de penitencia y si este lo exponen en la feria, ademas de ser un gustazo para el visitante por poder verlo, es un reclamo para la cofradía la cual tiene la posibilidad de captar hermanos y de ofrecer sus mesas de póstula para así conseguir ingresos para sus proyectos.­­
Además de poder mostrar la musica de nuestras bandas con las bandas de otras localidades para que fuera una fuente de contactos y sinergias entre Hermandades, Bandas y Artesanos.

-El primer año fue realizada en los salones de un famoso lugar de celebraciones, el cual da nombre a la feria, incluso hoy día, habiendo tenido dos ediciones más y siendo éstas dos ya en el recinto de la Feria de Muestras de Armilla. ¿Por qué cambió el lugar de celebración de la feria? Y su nombre, ¿por qué se mantiene?
Me alegra que me hagas esta pregunta: el nombre nace cuando nace el proyecto y está basado en el Capricho de un Cofrade, como su nombre indica, cuando se me ocurre esta idea mucha gente decia que me había encaprichado y yo les decía que la Feria era eso, un sueño para todo el cofrade que la visite, porque en ella se harían realidad los caprichos de cada cofrade, desde el que compra una pulserita, una corneta, una miniatura de un paso, hasta las ilusiones que los hermanos encargan con toda su ilusión: una saya, una pieza de orfebreria o un paso para sus titulares o simplemente se encaprichan con los sones de las Bandas que en la Feria participan.
La primera edición se realizó en este salón de celebraciones al cual se nos ocurrió acudir a raíz del nombre. Por suerte el evento creció tan deprisa que las instalaciones no estaban preparadas para un evento de esta magnitud, ya que no cumplían con la normativa además de que el aforo era bastante más limitado. Por ello decidimos trasladar el evento al recinto de Fermasa (Feria de Muestras de Armilla) porque aquí si disponiamos tanto de espacio como de medios para continuar creciendo y dar cabida tanto a los artesanos como a las hermandades que nos solicitaban espacio.
En definitiva, no es que se siga manteniendo el nombre por el recinto sino que el nombre nace antes, independientemente de la coincidencia con el lugar que se celebró la primera vez y fuera de tierras granadinas Capricho Cofrade no se relaciona con este salón.

-La feria cofrade en su primer año tenía una gran proyección, y hoy contamos los días para inaugurar su cuarta edición. ¿Hay margen de mejora e incluso subir las expectativas o ya se ha tocado techo?
Este año la feria sube un escalon más gracias a la ilusión de las hermandades que cada año innovan en sus montajes y ven esta oportunidad como un escaparate fabuloso para sus proyectos, por ello este año se presentaran algunos muy importantes.
Nos han llamado de otras localidades para celebrar la feria allí, pero como yo siempre digo: aún Granada tiene mucho que enseñar y creo que aunque cada año es más difícil, este año nos volveremos a superar, porque esta feria es de las hermandades, de los músicos y de los artesanos, y pienso que aun tienen mucho que mostrar y seguiremos mejorando para que asi sea.

-Debe ser difícil encontrar a un cofrade, al menos de nuestra ciudad, que no haya visitado el Capricho Cofrade en años anteriores, pero por si lo hubiese: ¿qué le diría sobre la feria? ¿Qué puede encontrar allí?
Yo le diría que no dude en ir, porque en la feria encontrará sobretodo sensaciones y un ambiente cofrade único que se consigue gracias a la convivencia de todos los que participan en ella, no sabría qué resaltar porque las pequeñas cosas que se viven en Capricho Cofrade son las que de verdad enganchan al visitante.

-Artistas que venden sus obras, bandas que buscan promocionarse y otras que no lo necesitan, y un pilar muy importante: las hermandades y cofradías. Ellas decoran con enseres los diversos stands para promocionar la hermandad, pero a su vez montan una mesa de merchandising personalizado para sacar una ayuda económica. ¿Es esto realmente la esencia de la feria cofrade?
La has definido perfectamente, son los pilares con los que trabajamos, esta feria la hacen ellos, yo simplemente la organizo.

-Como hemos comentado antes, las bandas y agrupaciones musicales son parte muy importante de la feria, ya que armonizan las jornadas a la vez que atraen a muchos amantes de la música cofrade. Unas vienen a promocionarse, y entendemos que las de más renombre son llamadas para atraer al público. ¿Todas las bandas que actúan son contratadas por la feria o algunas se prestan para la promoción?
Como bien has dicho, la Feria es un escaparate para estas bandas, este año hemos tenido más de 90 solicitudes para actuar en la Feria. Desgraciadamente no se les pueden dar cabida a todas y se hace una selección manteniendo bandas de todos los estilos y niveles. Es de agradecer la gran colaboracion que tenemos de estas bandas las cuales saben que Capricho Cofrade en un gran escaparate para sus curriculums y futuras contrataciones.

-En la edición de éste año se espera un espectáculo muy atractivo con la Banda de Cornetas y Tambores Cigarreras: ¿cómo ha sido posible esta contratación?
Bueno, la verdad es que cada año intentamos aportar a Capricho Cofrade algo novedoso y Cigarreras creo que era un reto pendiente para nuestra organización. Por parte de esta banda todo han sido facilidades y tras varios meses de conversaciones es un orgullo que participen en nuestra cuarta edición. Además hemos tirado la casa por la ventana y traemos a Guillermo Cano con su espectáculo ¡Lágrimas de Sangre’ como broche final del Sabado.

-Volviendo al terreno personal y cofrade, ¿cómo se plantea el resto del curso, tras la feria, para ti y tu hermandad?
Este es un año en el que nuestra hermandad termina ciclo de Junta de Gobierno y la prioridad es terminar los proyectos que se iniciaron. Respecto a mis cuadrillas, ya trabajando en el calendario de ensayos, actividades y acompañamiento musical para que todo salga lo mejor posible el proximo Viernes Santo.

-Óscar, ¿cómo vives la Semana Santa desde que se pone en la calle la hermandad de la Borriquilla en la tarde del Domingo de Ramos?
La vivo con emoción, ‘pateandome’ las calles tras las Hermandades con mi familia y amigos y disfrutando de todo lo bueno que tiene nuestra Semana Santa y nuestra ciudad.

-Tu conocimiento y perspectiva de las hermandades debe ser muy cercana y concreta al tener que tratar con muchas de ellas para la puesta en marcha de una nueva edición del Capricho Cofrade. ¿Cómo definirías nuestra Semana Santa, y en general el movimiento cofrade en Granada?
La definiría como una Semana Santa que día tras día va creciendo a pasos agigantados, cada vez hay cofrades más preparados en la Juntas de Gobierno que apuestan por la evolución de sus cofradías, y si todos los cofrades y hermandades de Granada quisiéramos lo nuestro, tanto como lo quieren en otras ciudades, y realzaramos las cosas tan buenas que tiene nuestra Semana Santa seríamos un referente para el mundo cofrade, porque realmente no somos conscientes del potencial que tiene el movimiento cofrade granadino y la admiración que despertamos fuera de nuestras tierras.

Y para conocerte un poco más de cerca:

- Un recuerdo de tu infancia como cofrade: La reparación de los varales de la Virgen de los Dolores en el Taller de fragua de mi tío Paco, era como ver algo mágico.
- Una imagen de Cristo de nuestra Semana Santa: Con todos los respetos, para mi titular del Cristo de la Buena Muerte, sin dudarlo el Señor de la Misericordia (El Silencio). Es para mí el Cristo de Granada.
- Una imagen mariana de nuestra Semana Santa: Sin dudarlo, mi Madre del Amor y del Trabajo.
- Tu mejor recuerdo como cofrade: La primera vez que me metí en la parihuela de Ntra. Sra del Amor y del Trabajo.
- Un momento especial de la Semana Santa (que no sea una de las hermandades donde procesionas): El año pasado por casualidad coincidieron la Banda de Tres Caidas y el Señor del Rescate al termino de su Vía Crucis y presencié cómo interpretaban la marcha “Manuela” de una manera muy solemne la cual se me quedó grabada en mi recuerdo de forma mágica.
- Tu rincón para ver cofradías: Hace muchos años solía ir a las escaleras de Pasiegas, a la famosa tribuna de los pobres, ahora me gusta moverme buscando varios rincones ya que en Granada cualquier rincón es mágico y sería muy difícil quedarme con uno solo.
- Tu momento más feliz como cofrade: Hay varios, pero si tengo que resaltar alguno, resaltaría el día en el que mi hija con meses vestida de costalera la puse debajo del Palio de Ntra. Madre del Amor y del Trabajo.
- Y el que te hubiera gustado no vivir: Recuerdo que, como en todas la hermandades, hay momentos de discrepancias y por desgracia en la veterana cuadrilla de costaleros de Ntra. Sra. Del Amor y del Trabajo tras su aniversario tuve que ver como muchos de mis compañeros de trabajadera se marchaban por discrepancias con el capataz.
- ¿Con que adjetivos definirías nuestra Semana Santa? Maravillosa, mágica y única.
- Cuéntanos alguna anécdota cofrade que hayas vivido: En estos años he vivido muchísimas, quizás la que más me hayan marcado fueron aquellas estaciones de penitencia con mi hermandad en la que los costaleros íbamos de mármol a mármol, como se suele decir, y recuerdo como nos mirábamos en silencio bajo la trabajadera y sufríamos hasta no poder más. En una levantá a pulso recuerdo morder la tela de la trabajadera hasta quedarme con ella en la boca, eran tiempos muy duros para los costaleros, gracias a Dios en esto se ha evolucionado bastante.


Muchas gracias Óscar por esta entrevista y por todo tu trabajo e implicación en nuestra Semana Santa. Esperamos que la cuarta edición del Capricho Cofrade sea un éxito.