lunes, 17 de abril de 2017

BALANCE SEMANA SANTA 2017

La Semana Santa de este año ya es historia. Habrá que esperar menos de un año para que llegue otra vez. El 25 de marzo de 2018 será Domingo de Ramos. Fue una Semana Santa en la que Monseñor Martínez se hubo de ausentar por motivos de salud. El cardenal Sebastián, que fuera también Arzobispo de Granada, lo sustituyó en el acto del Viernes Santo en el Campo del Príncipe y las celebraciones más destacadas de la Catedral, mientras que otros sacerdotes de la diócesis lo hicieron en el resto de los actos que habitualmente asiste. 
Ahora que han transcurrido poco más de 24 horas desde que se encerrara la última procesión que fue el Resucitado del Zadín, es el momento para un primer balance que por fuerza debe ser positivo. Es cierto que el que haya acompañado el tiempo meteorológico ha sido un factor muy importante para que merezca este calificativo, pero además el trabajo de las hermandades ha sido clave para que podamos afirmar esto.
Cortejo más numerosos
Siguen creciendo los cortejos. La afirmación está avalada por las primeras estimaciones realizadas por la Federación. Otra vez las mantillas y lo músicos han incrementado su número. Los penitentes también aumentan, aunque en una proporción menor. En este último grupo es en el que se debe de continuar trabajando de manera más insistente. A priori, los cortejos más numerosos fueron los de la Alhambra, Rosario, Aurora, Estudiantes, San Agustín, Borriquilla y Favores. Hubo uno que dio la sensación de que había decrecido, no referimos al Silencio, aunque no obstante, continúa siendo uno de los más extensos de nuestra Semana Santa.
Cumplimiento de horarios
Apenas hubo incidencias en el paso por Carrera Oficial. Sin embargo en los encierros, aunque cada vez hay más similitud entre lo que se anuncia y lo que realmente sucede, hay todavía que trabajar más en la puntualidad. Significativos los retrasos en cofradías que tanto fervor concita en su entorno como Rosario y Huerto. 
Música
Por difícil que parezca, las bandas y agrupaciones, continúan mejorando su nivel. Ejemplos como Gran Poder, Estrella o San Isidro de Armilla, ponen manifiesto un trabajo digno de ser alabado. Asunto distinto son los repertorios, aunque aquí tiene mucho que decir las cofradías. Es necesario que se aproveche el repertorio propio que van teniendo ya nuestras hermandades y no siempre se hace con la debida insistencia. Mención especial para los saeteros puesto que hay una nueva generación que viene con una fuerza y técnica asombrosas.
Flor
Este año los clavarios para los cristo basados en el rameje verde y la varidad floral, han sido los grandes protagonistas. El cuidado y el mimo con el que se cuida este elemento, es muestra del creciente nivel estético de nuestra procesiones. Además cada vez se impone más el clasicismo.
Costaleros
Ya hay lista de espera en varias cuadrillas. Por lo general destaca el buen gusto, aunque suele haber alguna excepción con coreografías que podrían ser más discretas y originales. Los costaleros, como las mantillas, son los que más proliferan en la actualidad.
Devotos y público
Posiblemente el capítulo del aumento de espectadores sean donde más ha influido la ausencia de lluvia y las temperaturas agradables. Es conocido el interés del granadino por sus procesiones de Semana Santa y de nuevo quedó demostrado.
En la fotografía el paso del Resucitado del Zaidín-Vergeles a su paso por la Gran Vía.