En la tarde noche de ayer domingo se vivía uno de los momentos más bellos y clásicos de esta cuaresma en la parroquia de San José de Calasanz, la subida del Señor de la Expiración.
En un acto de gran recogimiento con el templo a oscuras y a rebosar de gente, se iniciaba desde la sacristía la procesión claustral iniciada con cruz parroquial y ciriales, 12 parejas de hermanos con luz, ciriales y el Santísimo Cristo portado por diferentes compañeros de los medios de comunicación que trasladaron al Señor hasta el coro de la parroquia donde un sistema de polea y cadenas esperaba a alzar al Cristo hasta las alturas del templo para depositarlo en el paso.
El acto estuvo amenizado con distintas reflexiones, y lecturas evangélicas así como la participación del coro de la parroquia interpretando piezas como "Lacrimosa" del réquiem de Mozart o "Virgin Egum".
Cerca de una hora duro el acto, al cual prosiguió de manera más íntima el retranqueo de los paso de esta cofradía del Viernes Santo granadino.