Tras la reciente terminación de su restauración, se abre al
público el Camarín de la Virgen del Rosario, según nos comunica su
Archicofradía. Se trata de la primera vez que de forma regular se puede visitar
este monumento. Como indica el cartel que nos envía la corporación de Santo
Domingo, se trata de una de las joyas del barroco español y a la vez uno de los
monumentos menos conocidos de Granada, a pesar de su enorme categoría. Entre
las dependencias del Camarín llaman la atención además de la sala donde está
expuesta a la veneración la titular de la Archicofradía, el ante camarín, el
post camarín, la sala capitular y el patio. La entrada se realiza sin tener que
acceder al templo, desde donde se puede contemplar a la Virgen a través del
retablo situado en el lado del evangelio del crucero.