Tal y como se planteaba la jornada y de acuerdo con
las previsiones meteorológicas, se pensaba que era muy difícil que se celebrará
la procesión de la Virgen
de las Angustias, programada como es habitual en el último domingo de
septiembre. Así lo dábamos a conocer en CRUZ DE GUÍA. De hecho durante la
mañana la Romería
de San Miguel se había suspendido, puesto que cuando el Arcángel era llevado en
procesión desde la Parroquia
del Salvador a la Ermita
que tiene dedicada en el Cerro del Aceituno, una tromba de agua obligo a la
comitiva a refugiarse bajo el Arco de Fajalauza y aprovechando una tregua
retornar a su templo.
Con este panorama la Hermandad barajaba dos
alternativas. Si llovía insistentemente colocarían a la Virgen sobre sus andas en
la puerta de la Basílica ,
o obien si la lluvia lo permitía, llevarla hasta la Fuente de las Batallas y
retornar a su templo.
Pero los pronósticos variaron poco antes de la hora
señalada para el comienzo de la procesión e incluso salió el sol. De esta forma,
todo sucedió de acuerdo con lo programado. Miles de devotos participaron en las
filas.
A las 11 y 17 minutos retornaba la Virgen a su templo. Cuando
se situó junto a la portada se interpretó en Himno a la Patrona a cargo de la Banda del Carmen de Dúrcal y
con un estruendo de cohetería, se daba por concluída la procesión.