Vamos a hacer un recorrido
por la ciudad de la Alhambra, por su concepto general, su historia,su arquitectura,
y su relación con Granada. Porque era una ciudad. Construida con
características de urbanismo islámico y como centro de poder, era una ciudad palatina,
de palacios.Antes de ser ciudad, la realeza zirí vivía en la Alcazaba Cadima,
la meseta en lo alto del Albaicín, lo que hoy es San Miguel Bajo, Santa Isabel
la Real o San Nicolás. La Alhambra era la Alcazaba, ni siquiera con la
configuración actual que hoy le conocemos, ya que no existía la Torre de la Vela
ni la muralla corría igual. Debemos imaginar un castillo, un alcázar.
Muhammad I, ya de la
dinastía nazarí, decide hacer una ciudad en la colina enfrente de la ciudad,
del Albaicín. Para ello debía traer agua. La Alhambra para dejar de ser
Alcazaba, es decir, castillo de vigilancia, y querer ser ciudad, tenía que
tener agua y es por ello que realiza la impresionante Acequia Real. Su azud se
encuentra en el fondo del valle del Darro, a unos 6 kilómetros. Serpentea por
la colina del Cerro del Sol, y se puede ver desde el Sacromonte porque es una
línea de vegetación que acompaña a la acequia. Eso les llevaba agua a la colina
y así pudieron amurallar hacer la ciudad. Y es que recordemos que sin agua, no
existe ninguna ciudad.
Y así comienza a
construirse, poco a poco, una ciudad separada de Granada. Casi construida sin
tenerla en cuenta, con algunos accesos desde la ciudad, pero pocos y vigilados.
Se pensó completamente independiente, tanto que se alimentaban de lo que ellos
cultivaban. Los alrededores de la ciudadela tenían almunias y áreas de cultivo
y ganadería de los que se alimentaban, para así no tener nada de dependecia de
Granada.
La Alhambra por tanto es una
ciudad palatina que encierra en su interior diferentes barrios, calles, hitos y
diferentes tipos de residencias. Distingamos el barrio militar, el de la
alcazaba, que tiene dos tipos de viviendas: las de los jefes militares de alto
rango, que son pequeñas casitas con patio, incluso una tiene patio con alberca,
la otra barracones de estancia. El barrio palatino, donde se sitúan los
palacios tan visitados del Mexuar, Comares y Leones, con su gran mezquita y la
Rauda o cementerio donde una vez estuvieron enterrados los Grandes Reyes
granadinos. En un principio la sede de la
Iglesia Catedral de Granada se emplazó en esa Mezquita Real de la Alhambra.
Esta fue construida por Muhammad III y en los textos de Ibn al Jatib es
elogiada por sus mosaicos y lámparas de plata. Tras la conquista fue la primera
iglesia bendecida para poder celebrar misa en ella, mientras se construía otra
abajo en Granada.
Y la Medina o Secano.La
Medina o lo que llamamos Secano albergaba las viviendas de los habitantes de la
ciudad, habitantes que trabajaban para que la casa real viviera. Era, podríamos
decir, la zona de servicio. De esta forma no había cocinas en los palacios
porque ya estaban los hornos y los espacios de la Medina. Tenemos que darnos
cuenta que no es un palacio o un conjunto de palacios. Es que es una ciudad al
servicio de palacio, del rey que mandara. Si en el palacio se quería comer, la
Medina preparaba y llevaba.
La Alhambra es un recinto
amurallado de 100.000m², con un recorrido por la muralla de 2km. Como toda
ciudad, tiene sus calles: el paseo de Ronda que va por la muralla, la calle
Real Alta, que es por donde pasa la Virgen de la Alhambra en su procesión del
sábado santo hasta la Puerta del Vino y así continuar hasta la Puerta de la
Justicia, y la Calle Real Baja, que comunicaba los diversos palacios y que a
día de hoy está cortada por el palacio de Carlos V. Una ciudad con varias
puertas: la de las Armas que comunicaba Granada con la Alcazaba, la Justicia,
la única abierta a día de hoy, Siete Suelos, la puerta por la que entraron los
Reyes Católicos enfrente del Hotel Washigton Irving, y la Torre de los Picos,
que comunicaba Alhambra y Generalife. Pero además, la Alhambra no es y no fue
sólo la ciudad intramuros, es todo un territorio, es toda la montaña que se
extiende tras ella hasta casi Jesús del Valle, casi donde hace la curva grande
el ríoDarro. Es decir, el Cementerio es territorio Alhambra, el Llano de la
Perdiz. Estamos hablando de una extensión de casi 1.3M de metros cuadrados.
El barrio palatino congrega
a los palacios que fueron realizados por cada uno de los Reyes, porque
podríamos decir que allí cada Rey se hacía su casa, quería construirse su
propio palacio, o si admitía heredarlo, lo transformaba. Palacios que ya no se
usaban por ser de otros reyes, fueron reciclados y se cogieron muchas piezas
para la construcción de los nuevos, mientras se dejaba que los viejos se
arruinaran. Cada rey se hacía su palacio además con el estilo que le gustaba.
Si tenemos ojos atentos veremos que son muy diferentes las decoraciones que
encontramos en el Mexuar a las que observamos en Comares o en el Palacio de los
Leones. Las tendencias de color en los alicatados, las formas en los yesos.
Carlos V hizo lo que todos antes que él: construirse un palacio con su estilo y
con el tamaño máximo que se podía sin tocar los palacios apenas. De ahí el
característico giro que tiene
Otra cuestión es el
material, quizás sea lo más poético de su construcción. La Alhambra está hecha
de su propia tierra, de la tierra de la colina. Se hacía una mezcla con su tierra,
agua y cal y se le daba forma con encofrados. De forma que podemos pensar en la
Alhambra como tierra moldeada, tierra extraída que se hace arquitectura por la
mano del hombre.
Respecto a los bosques, hay
alguno de época nazarí y otros que no. El que estaba y se puede ver por ejemplo
en lo que dibuja Anton van den Wyngaerde, es el bosque de San Pedro. Incluso existen
crónicas que relatan las cacerías que el rey practicaba ahí, y que había
incluso jabalíes. El otro bosque, el que hay a continuación de Gomérez, es
nuevo, o relativamente nuevo. Pensemos que esa parte era la más “atacable” así
que en época nazarí no había bosque en esa zona ya que árboles cerca de una
fortaleza impiden es ver al enemigo y generaban problemas de seguridad. El
bosque que hoy conocemos se planta en el siglo XIX, aunque se habían plantado
árboles por esas laderas y estaban de cierto porte para el siglo XVII. Desde
luego ya forman parte del conjunto alhambreño y son una maravilla. De hecho, la
cuesta de Gomerezes una vaguada que baja desde el Cerro del Sol.
La
Puerta de la Justicia es la última que se construye para la ciudadela. Es del
año 1348 y se manda construir por Muhammad V. En árabe se llamaba Puerta de la Explanada al
encontrarse frente a un espacio tan amplio. Su impresionante forma preside el
lugar y es sin ninguna duda uno de los símbolos de la Alhambra. Podemos
observar en su clave la mano de Fátima, que representa los cinco preceptos del Islam, y encima de la puerta la llave representando a la dinastía
nazarí. Estos símbolos contrastan con la imagen gótica de la Virgen y el Niño,
de Roberto Alemán, colocada orden de los Reyes Católicos sobre la inscripción
árabe fundacional de la puerta para transmitir la cristianización de la
ciudadela tras la conquista.