CABECERA SEMANA SANTA DE 2016
En este mes de marzo, como período de espera a la, ya muy cercana, llegada de la Semana Santa, os traigo una cabecera centrada únicamente en reflejar una pequeña síntesis de lo que será la Semana Mayor que en breve nos invadirá.
En ella todo gira en torno a la representación de algunos de los titulares de las numerosas hermandades que recorrerán las calles de nuestra querida ciudad para rememorar la Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. Representaciones extraídas de fragmentos de otras tantas obras plasmadas tanto en lienzos como en diferentes piezas textiles.
De esta forma y, como es habitual en esta sección, interpretando la imagen de izquierda a derecha, encontramos, en primer lugar, el rostro inigualable de Nuestro Padre Jesús del Rescate, que tantas y tan profundas devociones despierta entre cofrades y fieles en general, inmerso en un halo blanco de divinidad, que nos repite que Jesús es la Luz en la oscuridad que guiará nuestros pasos en cada momento de nuestra existencia, hasta alcanzar la Vida Eterna.
Seguidamente, y avanzando un poco más hacia la derecha, en la parte inferior, encontramos la figura de un pelícano que se abre el pecho para dar sustento a sus crías con la sangre que brota de su ser. Símbolo del sacrificio que afronta Jesús en Su Pasión, el cual se entrega para la Salvación de la Humanidad y el perdón de los pecados del hombre.
En la parte central de la imagen, se nos muestra al Señor de la Santa Cena, muestra inequívoca de esa entrega a la que hacíamos referencia en el párrafo superior, que continuamente Se hace presente en la Eucaristía, y que será uno de los titulares, entre los de cinco hermandades, que abrirá la Semana de Pasión 2016, como lo hace cada año.
Justo debajo, observamos unas espigas de trigo que, junto con la sangre del pelícano anteriormente referido, hacen clara alusión al Pan y el Vino del Sacramento instaurado en la Última Cena del Señor.
Ya afrontando la parte derecha de la escena, observamos en la parte inferior, el semblante de Jesús Nazareno, enmarcado en una cartela entre dorada y plateada, como queriendo mostrarnos el sufrimiento del camino del Calvario, pero sin mostrar Su Cruz, intentando aliviar el peso de la misma en nuestros corazones.
Por último, en la parte superior derecha, aparece, como no podía ser de otra forma, un perfil cerrado de María Santísima del Mayor Dolor, para recordarnos la presencia callada y dolorida de la Virgen en la Pasión, soportando Su tremenda pena en el más absoluto silencio.
Ésta ha sido la cabecera para este mes, que os dejo para que podáis disfrutar de ella, esperando que sea de vuestro agrado.
De esta forma, me despido de vosotros hasta pasada la Semana Santa, deseándoos que todos vuestros sueños cofrades se hagan realidad en esta ya inminente Semana Santa 2016.
Un saludo y a disfrutar de nuestra Semana Mayor y nuestra tierra en primavera.