Nota de la Hermandad:
La capilla del Hogar Ángel Ganivet acogió en
la mañana de este pasado domingo la celebración de la XXXIV edición del
pregón de María Auxiliadora. La ADMA del mismo nombre iniciaba con este acto
los actos y cultos del presente mes de mayo, que culminaran con la salida procesional
del próximo sábado 28 de mayo. El miembro de la corporación salesiana Manuel García
Rosillo, hermano también del Rocío de Coria del Río y miembro activo del
consejo parroquial de su localidad, Atarfe, fue el encargado de pronunciarlo.
El orador del pasado año, hermano también de María Auxiliadora de la Alhambra, Víctor
Vedia, fue el encargado de presentarlo. Estuvieron presentes gran cantidad de
miembros de la asociación y de cofrades granadinos, y en el acto intervino el
coro de la Virgen de Don Bosco dirigido por Francisco Cañas.
Por espacio superior a los cuarenta minutos García Rosillo, que vestía chaqué, fue desgranado sus recuerdos y vivencias entorno a la Virgen Alhambreña y sus hijos, llegándose incluso a emocionar en distintas ocasiones, recordó como llego con el desaparecido coro atarfeño de Santa Ana a la capilla del Hogar y quedo prendado de la cara de la virgen Auxiliadora, ingresando entonces en la nomina de la ADMA. El pregonero, que iniciaba el acto con el rezo del ángelus, puso de manifiesto sus profundas creencias religiosas y su gran devoción mariana siendo interrumpido por los aplausos hasta en tres ocasiones, e intercalo sus vivencias y recuerdos con sentidos poemas a la Madre de Dios Auxiliadora. El canto rendidos a tus plantas ponía fin a este acto, que alcanza ya su trigésimo cuarta edición.
Por espacio superior a los cuarenta minutos García Rosillo, que vestía chaqué, fue desgranado sus recuerdos y vivencias entorno a la Virgen Alhambreña y sus hijos, llegándose incluso a emocionar en distintas ocasiones, recordó como llego con el desaparecido coro atarfeño de Santa Ana a la capilla del Hogar y quedo prendado de la cara de la virgen Auxiliadora, ingresando entonces en la nomina de la ADMA. El pregonero, que iniciaba el acto con el rezo del ángelus, puso de manifiesto sus profundas creencias religiosas y su gran devoción mariana siendo interrumpido por los aplausos hasta en tres ocasiones, e intercalo sus vivencias y recuerdos con sentidos poemas a la Madre de Dios Auxiliadora. El canto rendidos a tus plantas ponía fin a este acto, que alcanza ya su trigésimo cuarta edición.