El diseñador, pintor y escultor granadino, Pablo Fernández Hurtado, acaba de terminar su último trabajo. Se trata de una Santa Catalina de Siena cuyo destino será el Monasterio de la Piedad de las Dominicas de Torredonjimeno (Jaén). La escultura, está realizada en madera de cedro policromada y es de tamaño académico. Reproduce a la santa con el hábito de la orden y el birrete propio de su categoría de doctora de la Iglesia, además de los tradicionales atributos con los que se representa. Santa Catalina de Siena vivió durante el s. XIV y perteneció a la Orden Tercera de los dominicos.
Este obra es fruto del encargo de un mecenas residente en Granada y natural de la mencionada localidad giennense, al que le unen vínculos de amistad con la comunidad religiosa indicada, en cuyo templo se venerará esta talla. Precisamente el día de la festividad litúrgica de Santa Catalina, Patrona de Europa, el pasado 29 de abril, tuvimos la oportunidad de visitar el estudio de Pablo Fernández, aunque por el momento no desea que se haga público el resultado de su labor. Para ello prefiere esperar a su bendición que está prevista para este próximo 1 de mayo, en el citado monasterio.
