
La Hermandad puso en la calle alrededor de una treintena de hermanos con vela. El cortejo iba encabezado por la Cruz de Guía y los faroles. El Señor iba sobre una parihuela adornada con claveles rojos e iluminada por cuatro guardabrisas. El Cristo lucía una túnica morada con bordados en oro. La imagen iba acompañada por música de capilla.