José Manuel Rodríguez Viedma fue el encargado de
dar el XXXIV Pregón de la Hermandad de Paciencia y Penasen el Colegio Mayor de
San Bartolomé y Santiago. El lirismo, la reflexión, el verbo fácil y su
oratoria elocuente, fueron las características del último pregón de esta
Cuaresma 2013.

Más tarde, tomó la palabra José Manuel Rodríguez
Viedma, quién comenzó afirmando que su pregón iba más allá de las
formalidades, pues "sólo pregonaba con el alma". El pregonero hizo
una gran exaltación poética sobre las imágenes titulares y su salida
procesional el Miércoles Santo. Realizó una profunda reflexión sobre la palabra
paciencia, definiéndola como "palabra hermosa y gran virtud". Posteriormente
manifestó que le verdadero pregón es la estación de penitencia de la cofradía,
afirmando que cuando el Cristo sale a la calle "sólo hay paciencia en
Granada". También destacó que el Señor de la Paciencia se abraza "a
la columna de los pecados de los fieles", mientras con su "bondad
serena y mirada templada" los va perdonando.

Más adelante, el pregonero hizo una reflexión
sobre la importancia de ser cristiano y el compromiso que ello conlleva en la
vida. Resaltó la importancia de la juventud en nuestras cofradías e hizo una
pequeña crítica a aquellos que no ven con buenos ojos a la Semana Santa,
afirmando "no pedimos que nos comprendan, sino que nos respeten".
Finalmente, José Manuel Rodríguez afirmó que él
es un "simple poeta orador de versos" y que el pregón es sólo
"aire y voz" una vez recitado.Finalizó sus palabras como mejor sabe, reciantdo unos versos.