María Santísima de la Misericordia Coronada
(Granada)
Es
éste uno de los palios más completos de nuestra Semana Mayor. Iconográficamente
destaco la gloria del techo de palio, tratándose la Coronación de la Virgen por
la Santísima Trinidad, realizada por el pintor granadino Juan Díaz Losada. En
este caso las figuras pintadas de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo,
interactúan con la dolorosa, en el gesto de imponerle una corona de estrellas.
Nuestra Señora del Rosario en sus
Misterios Dolorosos (Granada)
Tanto las caídas como el manto se caracterizan por sus ricos y suntuosos bordados, en los que se entremezcla el hilo de oro, con querubines en marfil. En cuanto a la orfebrería, destacamos los laterales de sus respiraderos, donde figuran la Virgen de las Angustias y la Virgen del Rosario “de plata”.
Nuestra Señora de la Victoria (Granada)
La Virgen de la Victoria debe su advocación al final
de la Guerra Civil española. Esta singular imagen mariana fue tallada por
Espinosa Cuadros, adaptándose muy bien al tipo procesional. Se trata de una de
las más “gloriosas” dolorosas de la Semana Santa granadina, al no tener
lágrimas.
Su
paso de palio bordado en sedas, presenta la peculiaridad de poder ser leído, al
ostentar tanto en las caídas, como en los respiraderos inscripciones
laudatorias de María. En sus respiraderos hay escenas talladas en madera,
representándose entre otras, la sagrada familia.
Soledad de Nuestra Señora (Granada)
Realizada por Manuel González Santos, a comienzos
del siglo XIX. Es una dolorosa de las denominadas de talla completa, la cual
conjuga a la perfección, el clasicismo propio del academicismo, con la herencia
del barroco. Tiene una peculiar postura, mediante la cual expresa su dolor a
través los brazos abiertos.
En
su paso llama la atención la presencia de un pequeño relicario, a modo de
templete en el entrecalle, con reliquias del Señor de la Humildad. En el
canasto tiene relieves en orfebrería con escenas de la pasión.
Texto: José María Valverde Tercedor
Fotografías: Luis María Contreras