El Salón de Actos de la Corrala de Santiago estaba repleto ante la expectación que había despertado la presentación de las cartelas de la delantera y el bordado de los faldones del misterio de la Cañilla. Las obras de arte se exhibieron acompañadas de la delantera del respiradero del paso. Espectacular el trabajo de José María Leal, escultor sevillano que así se presenta en Granada. De acuerdo con el programa iconográfico original de Manuel Amador, según el cuál el canasto representa la figura de Cristo Rey, la cartela central la de Cristo Rey del Universo, a su diestra el momento del Bautizo en el Jordán, cuando Dios Padre proclama a Jesús como su Hijo Amado, y en la siniestra el instante en que arrestado y ante el Sanedrín le interpelan sobre si se trata del Rey de los Judíos. Para el respiradero ha realizado tres relieves. El central recoge al Dulce Nombre de Jesús, el popular Facundillo, titular de la Hermandad. A sus lados figuran San Ignacio de Loyola, que recoge la propagación que de la figura de Cristo Rey por la Orden Jesuita, y San Francisco de Paula, una alusión al titular que preside el paso, dada la tradicional humildad franciscana. Obras todas primorosas que siguen el dibujo de José María Martínez, venciendo la dificultad de las pequeñas dimensiones del espacio y actuando como poderosos escorzos. Precisamente el citado dibujante se ha encargado de diseñar y bordar la delantera de los faldones con oro y sedas, en armoniosa conjunción con los respiraderos. Este bordador de origen jienense, lleva dos décadas asentado en el Sacromonte, donde tiene instalado su taller.
Antonio Manuel Pavón, Hermano Mayor de la Cofradía, insistió que la idea es terminar las cartelas en su mandado, que expira el año próximo, y es probable que también se concluyan entonces los bordados. Antes de la realización de estas cartelas se inició el trabajo por el accitano Ángel Asenjo, aunque ha falta acuerdo para la conclusión de la obra y finalmente todas serán de Leal. Al término del acto, los asistentes tuvieron la oportunidad de disfrutar de una copa de vino español que sirvió para animar la convivencia.