martes, 24 de julio de 2012

EL SAGRADO PROTECTOR DE GRANADA ESTÁ EN SAN ANTÓN





El Cristo de San Agustín, Sagrado Protector de la Ciudad de Granada, junto con la Virgen de la Consolación, han sido trasladados en la jornada de este lunes 23, como ya adelantó Cruz de Guía, desde su Capilla en el Convento del Santo Ángel Custodio, hasta la Iglesia de San Antón. El motivo son las obras que han comenzado en su sede canónica, con el objetivo de adaptar la solería a una disposición que facilite la salida en estación de penitencia de cada Lunes Santo. También está en San Antón el Nazareno de las Penas, igualmente titular de la corporación, aunque debido a su estado de conservación fue llevado con medios mecánicos y de una manera discreta.
Tres cuartos de hora empleó la comitiva en recorrer un trayecto de pocos centenares de metros en el que no faltó el arropo popular. Era "un extraño Lunes Santo", sin hábitos penitenciales, ni el esquilón conventual doblando a duelo, a plena luz del día, pero con la misma devoción prendida en los corazones de los hermanos y los devotos, conscientes del acontecimiento histórico que forma parte de los anales cofrades de Granada.
A la hora en punto, nueve de la noche, se abría el portón del templo conventual y una tímida salva de aplausos, dio paso al silencio y recogimiento que impregna las procesiones del Cristo de San Agustín. Tras el muñidor y sus servidores, cuatro cirios de respeto antecedían a la Cruz de Guía y sus hachones de cera tiniebla, el mismo tono que todo el tramo del Señor. Hubo numerosos hermanos en las filas y entre ellos el estandarte del Santo Ángel, también titular de la asociación de fieles, aunque en este caso su talla, permanecerá en el interior de la sede.
El Sagrado Crucifico aparecía sobre el túmulo de los Duques de Gor, que habitualmente cede para estas ocasiones la Comunidad de Padres Escolapios de Granada. A la luz del día, imagen inusual, el Cristo de San Agustín aparece con una policromia bastante más oscura y se aprecía con más detalle el realismo magistral de su estudio anatómico. Su rostro conmueve de una manera especial. Los costaleros de la Virgen llevaban las andas.
Después se ubicaba la sección mariana, donde iba el Guión de la Cofradía. La Virgen de la Consolación cerraba el cortejo a hombros de los costaleros del Cristo. A ella le lanzaron una petalá desde un balcón a poco de llegar a San Antón y cuando comenzaba su encierro en el templo de las Capuchinas, un grupo de hermanos de la Estrella de Guadix, entonaron dos cánticos marianos que se unieron a la emoción del momento.
Las imágenes recibirán ahora multitud de visitas. San Antón dispone de un amplio horario de apertura y son miles los fieles que por allí discurren en cada jornada. El retorno al Santo Ángel está previsto antes del 14 de septiembre, cuando coincidiendo con la festividad de la Exaltación de la Santa Cruz, el Ayuntamiento bajo mazas, renovará en nombre de la Ciudad de Granada, el Voto al Cristo de San Agustín.