CABECERA CUARESMA
La
cabecera del blog que ahora nos ocupa, viene a hacer una síntesis de lo que
será este período cuaresmal en el que nos hallamos inmersos.
Como
podemos ver, la misma se fundamente en una parte central y principal, que nos
muestra un altar de cultos al uso que, a su vez, conforma un Calvario, rematada
dicha médula espinal por unas esquinas decorativas con motivos ornamentales
barrocos.
El
anteriormente mencionado altar de cultos, se divide en cuatro niveles de
altura: en el primero se nos muestra la figura de San Juan de Dios, ya que es
el Copatrón de Granada, y además podríamos decir que es la imagen que inaugura
los desfiles procesionales en la Cuaresma, flanqueado a ambos lados por piezas
de candelería y sendas jarras con flores; el segundo nivel tan sólo queda
configurado con nuevas piezas de candelería y nuevas jarras de flores, siendo
todas ellas flanqueadas por sendos faroles en los laterales; en el tercer nivel
se nos representa la parte inferior del más arriba mencionado Calvario, donde llama
nuestra atención la imagen de la Soledad de la hermandad del Santo Entierro y
la imagen de San Juan como discípulo amado, ambas escoltadas por las piezas de
candelería reiteradamente mencionadas en los niveles antecedentes; y en el
cuarto nivel aparece la imagen del Crucificado de la Redención, flanqueado por
dos candeleros, enmarcado en un repostero y coronado por un dosel en el que
aparece centrado el escudo de Granada como sustento de la vida cofrade de los
habitantes de su ciudad.
En
torno a esta representación del Calvario, nos puede surgir la pregunta de por
qué aparecen representadas en el mismo dos imágenes titulares de hermandades
granadinas de filosofías tan diferentes. A esto, la intención sería responder
que se pretende reflejar que
aunque Granada se encuentra dividida por un río que separa dos zonas de la
ciudad muy distintas, la Cuaresma y la Semana Santa sirven para afianzar la
unión entre todas las partes y los barrios de la ciudad, haciendo que el sentir
cofrade tenga la misma dimensión en cada una de sus calles y plazas. Pero
además podemos responder que dicha Semana Mayor es capaz de enlazar períodos de
arte y de estética tan apartados como para que dos grandes obras de dos
importantes imagineros, como pueden ser José de Mora y Antonio Díaz, queden
unidas en un mismo sentimiento que es el sentimiento cofrade granadino.
Por
último, y a ambos lados del dosel, aparecen dos fechas que vienen a indicar el
comienzo de la Cuaresma, 13 de febrero, Miércoles de Ceniza, y el final de la
misma, 28 de marzo, fecha esta última que se corresponde al Jueves Santo del
presente año, ya que aunque en la tradición cofrade la Cuaresma termina el
Domingo de Ramos, lo cierto es que el término de la misma lo marca la Última
Cena del Señor, que aconteció, según nuestras creencias, en la anteriormente
mencionada noche del Jueves Mayor.
Espero,
que esta nueva cabecera os haya gustado y, por lo menos, os haya podido hacer
deteneros en observarla aunque sea un solo instante.
Finalmente
os emplazo a la próxima cabecera que se encontrará ya inmersa en la vorágine de
la Semana Santa.