En el altar levantado con motivo de la Novena
Extraordinaria que la Hermandad celebra este año con motivo del V Centenario de
la hechura del Santísimo Cristo de San Agustín, podemos ver representados tres
importantes episodios de la historia del Santo Crucifijo.
De esta forma, en el centro aparece una copia
original de la Bula Papal concedida por Pío IX, fechada en la basílica de San Pedro el día 27 de febrero
de 1863. Concedía con esta indulgencia plenaria, a título personal, el día del
ingreso en la Hermandad y también en el momento de la muerte, además de otras
indulgencias relacionadas con el culto, autorizando a celebrar “los días
cinco, siete, ocho y nueve de Agosto y en todos los viernes del año no
impedidos con oficios de primera o segunda clase u otro oficio de Ntro. Señor
Jesucristo, feria, vigilia u octava privilegiada, pueda cantarse en la Iglesia
del Sto. Ángel Custodio de esta Ciudad, donde se venera actualmente el Stmo.
Cristo de S. Agustín, Misa votiva solemne de la Stma. Cruz con Gloria y Credo”
La Bula aparece a los pies del Santísimo Cristo, bajo tiara papal y
custodiada por la conocida custodia-relicario en forma de pelícano, símbolo del
amor y sacrificio de Cristo, realizado en plata de ley, oro, piedras preciosas
y esmaltes, que cada Lunes Santo se sitúa en el frontal del paso del Cristo de
San Agustín. Esta custodia fue realizada con motivo del conocido robo sacrílego
de Alhama de Granada, en 1725, para custodiar parte de las formas incorruptas que
fueron depositadas en el Convento del Santo Ángel, y que aún son custodiadas
por la comunidad de Franciscanas Clarisas.
En los laterales del altar, sobre columnas doradas y cojín, aparecen
dos alegorías que representan, a la izquierda a Isabel II, y a la derecha, al
Excelentísimo Ayuntamiento de Granada. En la primera observamos elementos
representativos de la Casa Real, como son la corona y el cetro, con otros que
eluden específicamente a la figura de Isabel II, como son su escudo y la
banda de la Orden de la Corona de Wurtemberg, que solía lucir la monarca en
todos sus retratos, junto con la Orden de Carlos III. Pendiendo de este cojín,
observamos una filacteria en la que se lee “Adorabunt eum omnes reges terrae”
que viene a significar: Adorarán a Jesucristo todos los reyes de la Tierra. uno
de los salmos pertenecientes al sermón de la solemne función religiosa
organizada por la Hermandad el 18 de enero de 1863, y presidido por la Isabel
II donde se declara como Protectora y
Hermana Mayor Perpetua.
En el lateral derecho, se realiza una representación del Ayuntamiento,
por la estrecha relación de este con la Imagen del Santísimo Cristo,
declarándolo como Sagrado Protector de la Ciudad en 1679, con motivo de la
remisión de la epidemia de peste que azotaba la ciudad. Podemos encontrar
elementos como el bastón de mando y el toisón de la ciudad, las mazas y
fanfarrias, características de los desfiles civiles de la ciudad en las grandes
ocasiones, así como otra filacteria donde podemos ver el lema utilizado por la
Hermandad “Sacrus Protector Urbis Granatensis”
Por último decir también que las seis jarras que adornan este
magnífico altar están compuestas de Rosas, Iris, Estátice, Limonium, Cardos del
Nilo, Brunias y Tulla.