Hoy es Jueves Santo Especial. Rezaré por todas aquellas personas que están librando la batalla por esta pandemia del Covid-19 que sigan teniendo viva la Esperanza de curarse y reencontrarse con sus familias. Por aquellos que desgraciadamente han fallecido, para que puedan compartir junto a Jesús la Gloria de la Resurrección. Por aquellas personas que hacen lo posible para que la ciudadanía esté abastecida, los que cuidan de los enfermos, desinfectan las calles, las fuerzas de seguridad y un largo etc.
Hoy es un Jueves Santo Especial. No podré revivir mi
Estación de Penitencia de cada Jueves Santo con mi Cofradía de Nuestro Padre
Jesús Nazareno y María Sta. de la Esperanza de Motril.
Cofradía en la que llevo desde el año 2000. Una hermandad de
penitencia a la que decidí pertenecer cuando tenía 9 años. Aquella primera Estación
de penitencia en la que me resultaba muy aparatoso ir con mi capirote como los
adultos y con mi vela de bombilla. Aquellos años en los que Diego Martín les
cantaba a Ntro. Padre Jesús Nazareno “Panis Angelicus” y a María Stma de la
Esperanza “Ave María” mientras que salían los pasos desde la Casa de Hermandad
desde la Calle Cañas y gran sentimiento inundaba mi corazón. Aquellos años de
la antigua Carrera Oficial en la Calle Nueva.
Aquellos años en los que los
tronos de mis titulares se portaban al estilo malagueño. Aquellos años en los
que se hacía el encuentro de las Sagradas Imágenes en la Pza. de España. Aquellos
años que tras encerrarse mi Cofradía, salía corriendo a ver a la Hermandad de
Pasión en el Cerro y después a la Cofradia de la Buena Muerte por la Pza. de
España.
Esos momentos especiales que no podre revivir hoy Jueves
Santo a partir de las 20.30 h. Rezar un Padre Nuestro entre todos los Hermanos
y junto a nuestro consiliario antes de iniciar la Estación de Penitencia. Ver
como se abre el portón, empieza a salir la Cruz de Guía y los capuchones.
Llamar al Paso del Nazareno y observar como sale a las calles de Motril al son
de la Marcha Real.
Con los sentimientos a flor de piel, desde que llevo la Cruz
Parroquial en esta Cofradía desde hace quince años, cada Jueves Santo sigo el
caminar del Nazareno tras sus pasos por esta ciudad de la costa tropical. También
encabezando la sección de los penitentes de María Santísima de la Esperanza, guiándola
con las luces de los capuchones para que se encuentre a su Hijo por el Camino
del Calvario.
Hoy es un Jueves Santo Especial. Aunque no puedan
procesionar mis Sagradas Imágenes, esta situación nos ayuda a profundizar en
nuestra Fe Católica. A sacar lo mejor de los humanos, la solidaridad, la
esperanza, la misericordia, la empatía, el amor al prójimo como nos enseñó
Jesús durante toda su Vida.
Jesús Nazareno y Virgen de la Esperanza ayudanos ante esta
destructiva enfermedad. Acompañad a los enfermos durante estos difíciles
momentos y ayudadlos a que se restablezcan. Y guiad a los que han perdido sus
vidas hasta el Reino de Dios.