Que la Cuaresma dure 40 días no es arbitrario. Este número tiene un
significado simbólico de origen judío. Así, 40 días duró el Diluvio Universal,
40 años estuvo en el desierto Moisés, desde que abandonó por primera vez
Egipto, hasta que retornó a este lugar para la liberación del pueblo judío y 40
días duró el retiro de Jesús también en el desiert, luego de su Bautismo en el Jordán y
antes de emprender su vida pública. Incluso podemos relacionar esta cifra con
los 400 años que permaneció el pueblo judío en Egipto. Nuestra Cuaresma, dura
en realidad 46 días, los que transcurre entre el Miércoles de Ceniza y el
Domingo de Ramos. Ello obedece a que hubo una época en que se ayunó durante
todo este tiempo litúrgico y dicha práctica no era compatible con los domingos,
días en los que no se podía llevar a efecto esta acción. Así los seis días de
más obedecen a los domingos que se viven durante cada Cuaresma.